Cuando el adiós llega pronto: Mémora y Pedpal refuerzan el acompañamiento pediátrico con un convenio pionero

Cuando el adiós llega pronto: Mémora y Pedpal refuerzan el acompañamiento pediátrico con un convenio pionero

No hay mayor injusticia que la de ver partir a un niño. Pero incluso en ese tramo final, hay espacio para la ternura, la dignidad y el acompañamiento humano. Con esta convicción, Fundación Mémora y la Sociedad Española de Cuidados Paliativos Pediátricos (Pedpal) han sellado un acuerdo que busca transformar esa etapa tan compleja en un espacio más humano, más comprendido, más acompañado.

Este convenio de colaboración —con una duración inicial de un año y prorrogable— une a dos entidades con un propósito compartido: mejorar los cuidados y la sensibilización en torno al final de la vida infantil. Porque no basta con tratar una enfermedad; también es necesario acompañar, comprender y cuidar todo lo que la rodea.

La iniciativa contempla campañas de sensibilización, formación específica y jornadas dirigidas a profesionales, familias y sociedad en general. El objetivo es doble: apoyar directamente a quienes enfrentan este tipo de procesos —niños, familias y equipos médicos— y fomentar una conciencia colectiva sobre la importancia de unos cuidados paliativos pediátricos integrales y centrados en la persona.

Desde Pedpal, su presidente, Álvaro Navarro, ha subrayado la urgencia de reforzar estos cuidados en España. “Es imprescindible garantizar una atención de calidad y cercana tanto al menor como a su familia, durante todo el proceso”, señala. No es solo una cuestión médica, sino profundamente humana.

Por su parte, José Joaquín Pérez, director general de Fundación Mémora, ha puesto el foco en la necesidad de una mirada integral: “La atención debe abordar todas las dimensiones que conviven en el final de vida: la física, la emocional, la social y la espiritual. No sólo del niño, sino también de quienes le rodean y le cuidan”. Para Mémora, colaborar con Pedpal es una forma de extender su compromiso con las personas hasta donde más lo necesitan.

Pedpal nació en 2016 como respuesta a una carencia evidente: la falta de una red estructurada de profesionales dedicados a los cuidados paliativos en pacientes pediátricos. Hoy, sigue trabajando por un sistema más preparado, más humano y más justo con los que más sufren.

Fundación Mémora, por su parte, ha consolidado su actividad en torno a cuatro pilares: sensibilización, investigación, formación y acción social. Como parte del Grupo Mémora —referente funerario en España y Portugal con más de 62.000 servicios anuales—, su labor trasciende lo clínico: apuesta por cambiar la mirada social hacia el final de la vida.

Porque cuando no se puede ganar tiempo, sí se puede dar sentido. Y acompañar hasta el último aliento con humanidad, es también una forma de sanar.