El tiempo no se detiene, y tampoco la necesidad de espacio para quienes ya descansan. En Alcalà de Xivert lo saben bien. Por eso, ya están en marcha las obras de ampliación del cementerio municipal. Se están construyendo 56 nuevos nichos sobre una cimentación preparada en 2021, en una obra que busca anticiparse al futuro.
La actuación consiste en un nuevo bloque con cuatro hileras a doble cara. Es idéntico al que se levantó hace unos años, una solución práctica, ordenada y respetuosa con el entorno del camposanto. Para Javi García Pitarch, concejal de Urbanismo, esta ampliación permitirá «cubrir la demanda de los próximos años con tranquilidad y previsión».
La inversión, de 59.500 euros, se enmarca dentro del plan Castelló Impulsa de la Diputació de Castelló, y se suma a otras mejoras urbanas como la accesibilidad en la calle Rench, en Alcossebre.
En un lugar donde cada metro cuadrado guarda historias y despedidas, esta ampliación no solo es una obra de infraestructuras. Es una forma de cuidar la memoria colectiva y garantizar que, cuando llegue el momento, todos tengan un lugar digno donde ser recordados.
