Ceuta se tiñe de naranja por la dignidad animal: clamor por un crematorio para mascotas

Ceuta se tiñe de naranja por la dignidad animal: clamor por un crematorio para mascotas

Cada noche, Ceuta se duerme rodeada por la historia que encierran sus murallas, pero este sábado, una luz distinta las atravesó: un resplandor naranja que no tenía nada de decorativo. Era un mensaje. Un símbolo. Una llamada de atención.

El Foso y la Fortaleza del Hacho se iluminaron con ese color para visibilizar una causa que gana fuerza: la dignidad en la muerte de las mascotas. Porque en Ceuta, cuando un animal muere, acaba en un congelador, esperando su traslado a la Península junto a restos de todo tipo. Sin ceremonia, sin despedida. Sin opción.

Esto es lo que ha motivado al Movimiento Ciudadano para la Dignidad Animal, que ha salido a la calle para exigir lo que en la mayoría de municipios peninsulares ya es normal: un crematorio. Ni más, ni menos. Un lugar donde decir adiós como se merece a quien ha sido parte de la familia.

Durante el «mes naranja», la ciudad se ha llenado de lazos, carteles y símbolos colocados por quienes no quieren que el afecto hacia sus animales termine en una bolsa negra. Veterinarios, familias, asociaciones… todos empujan en la misma dirección. El lema es claro: “Cuenta conmigo”. Porque la unión, aquí, sí hace la fuerza.

Actualmente, Ceuta tiene unas 11.000 mascotas. Y sus familias saben que un final digno no debería ser un privilegio, sino un derecho. La administración local ha señalado que hay empresas interesadas en construir un crematorio, pero no se ha concretado ningún paso. Mientras tanto, el Movimiento mantiene viva la esperanza… y encendida la luz naranja.

Este gesto simbólico no ha sido solo un acto emotivo. Ha sido un grito pacífico y coordinado que dice: “Basta”. Basta de despedidas frías. Basta de ignorar lo que duele. Ceuta ha encendido sus murallas, pero lo que realmente empieza a iluminarse es la conciencia de una ciudad que pide, simplemente, humanidad para sus animales.