El cementerio de Jaén: un espacio renovado para honrar la memoria
El cementerio de San Fernando, un lugar clave para la memoria colectiva de Jaén, se encuentra ahora en una nueva etapa. Con una inversión de 371.000 euros, el Ayuntamiento ha completado una serie de mejoras que no solo amplían su capacidad, sino que también transforman su aspecto para adaptarlo a las necesidades de los vecinos y a la dignidad que merece un espacio de este tipo.
Más espacio, más memoria
Durante años, el cementerio enfrentó un problema de espacio que generaba preocupación entre los jiennenses. Ahora, con la construcción de 240 nichos y 144 columbarios en una superficie de más de 700 metros cuadrados, se pone fin a esta carencia histórica. “Era una necesidad urgente que hemos resuelto con esta ampliación”, explicó Antonio Losa, concejal de Conservación e Infraestructuras Municipales.
Pero las mejoras no se detienen ahí. Según Losa, el acceso al cementerio también ha sido objeto de una significativa transformación. La entrada luce ahora vinilos decorativos en blanco y negro, que aportan una estética sobria y elegante al recinto. Además, se han realizado trabajos en las zonas verdes, mejorando el entorno para los visitantes, que frecuentan este espacio no solo en fechas señaladas como el Día de Todos los Santos, sino durante todo el año.
La capilla y la cubierta, protagonistas del futuro
El Ayuntamiento no solo ha solucionado los problemas de capacidad y mejorado la apariencia del cementerio, sino que también ha emprendido acciones para devolverle su esencia histórica. Entre las novedades destaca la recuperación de la antigua capilla de rezo, un espacio que durante años fue un punto de encuentro para la oración y el recogimiento. “Muchos jiennenses habían solicitado la vuelta de este oratorio, y estamos felices de haber dado los pasos necesarios para que vuelva a estar operativo”, afirmó el concejal.
Otra intervención importante será la reparación de la cubierta principal del acceso al cementerio, que ha estado sostenida por puntales durante más de una década. “Es un proyecto esencial para dotar al espacio de la seguridad y las condiciones que necesita. Era una asignatura pendiente que estamos resolviendo”, subrayó Losa.
Un cementerio que mira al futuro
Con estas acciones, el cementerio de San Fernando no solo gana en funcionalidad y estética, sino que se consolida como un espacio que combina modernidad y respeto por las tradiciones. Los vecinos de Jaén, que han seguido de cerca estos cambios, pueden ahora disfrutar de un lugar renovado para honrar a sus seres queridos en condiciones más dignas y seguras.
Esta transformación, que apuesta tanto por lo práctico como por lo simbólico, marca un antes y un después para uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad.