En Cádiz, el bienestar de una colonia de gatos en el antiguo cementerio de San José ha generado una disputa legal que involucra al Ayuntamiento y a la empresa pública Cemabasa. Las asociaciones en defensa de los derechos de los animales, El Gato Genovés y Barrio Felino, han presentado una denuncia ante el juzgado de guardia, acusando a las entidades de un supuesto delito de abandono de los 80 gatos que residen en el recinto.
El conflicto surge a raíz de una nueva restricción que limita el acceso de los voluntarios que alimentan y cuidan a estos gatos a solo un día a la semana durante el mes de agosto. Anteriormente, se permitía el acceso tres veces por semana, pero, según la denuncia, la reducción se debe a una supuesta falta de personal encargado de abrir y cerrar el cementerio. Esta restricción ha alarmado a los defensores de los derechos de los animales, quienes argumentan que las altas temperaturas de la temporada podrían causar que la comida y el agua dejadas una vez a la semana se estropeen, poniendo en riesgo la vida de los felinos.
Las asociaciones denunciantes aseguran que los voluntarios, acreditados por el propio Ayuntamiento, han estado cuidando de esta colonia desde hace mucho tiempo. Sin embargo, la falta de acceso regular podría condenar a los gatos a sufrir sed e inanición, además de aumentar el riesgo de que algunos intenten escapar y sean atropellados.
El Ayuntamiento de Cádiz y Cemabasa han sido acusados de ser conscientes del riesgo que su comportamiento representa para la vida de los gatos, pero de no tomar medidas adecuadas para remediar la situación. Las asociaciones sostienen que esta inacción viola la protección prevista en la Ley 7/2023 y podría constituir un delito de abandono de animales según los artículos 340 ter y quater del Código Penal.
La denuncia también señala que los actos propios del Ayuntamiento, como el pago de esterilizaciones para los gatos de esta colonia, demuestran su responsabilidad sobre estos animales. Además, se ha documentado la existencia de esta colonia a través de un censo oficial y un documento llamado «Bitácora de castraciones de San José», que se encuentra en los archivos municipales.
Los activistas han hecho un llamado a las autoridades para que reconsideren las restricciones de acceso y aseguren que los gatos reciban el cuidado adecuado, especialmente durante los meses de calor extremo. Asimismo, han solicitado que se investigue la situación y se tomen medidas para garantizar el bienestar de los animales.
Este caso ha puesto de manifiesto la importancia de la gestión adecuada de las colonias felinas y ha generado un debate sobre la responsabilidad de las autoridades locales en la protección y cuidado de los animales. Mientras se espera una resolución legal, las asociaciones continúan vigilantes, comprometidas con la defensa de los derechos de los gatos y en busca de soluciones que eviten el sufrimiento de estos animales vulnerables.