En Alcabre, un rincón privilegiado de Vigo, los nichos del cementerio parroquial ofrecen una vista inigualable hacia la ría y las islas Cíes, un lugar donde descansar eternamente tiene un precio de 3,000 euros. Juan P., gestor del camposanto, comenta que estos nichos son posiblemente los más caros de la ciudad. El cementerio, junto con el de Bouzas, forma parte de los mayores gestionados por la empresa Geslumen, que administra en total 17,600 tumbas en Vigo.
Recientemente, el cementerio de Alcabre ha inaugurado un nuevo columbario con losas de mármol rosa, ubicado en el lugar de la antigua floristería. Auri, la florista del lugar, señala que, aunque las tumbas están adornadas con flores frescas, la pandemia ha reducido la frecuencia de visitas y compras florales.
El párroco, don Fernando, ha sido fundamental en las reformas que han hecho el cementerio más accesible para personas con discapacidad. Desde las alturas del cementerio, Juan destaca la belleza del paisaje, donde los mariscadores trabajan en la ría, y la antigua iglesia al fondo completa una estampa serena y majestuosa.
En Vigo, la Iglesia gestiona 32,000 tumbas, mientras que el Ayuntamiento administra otras 30,000 en sus cementerios. Los precios de los nichos varían según la duración de la concesión, con opciones que van desde 429 euros por seis años hasta 2,397 euros por 50 años.
Además de los cementerios gestionados por la Iglesia y el Ayuntamiento, Vigo cuenta con tres necrópolis privadas, siendo la más grande la de Candeán. Allí, los nichos son vendidos a 3,000 euros para los residentes y 3,400 para los no residentes. La gerente, Ana Blanco, anuncia que están desarrollando un columbario y un crematorio para satisfacer la creciente demanda de incineración.
El viaje de Juan P. desde la distribución de dulces hasta la gestión de cementerios fue impulsado por su propia experiencia personal. Tras el fallecimiento de su padre, un republicano exiliado, Juan se percató de la necesidad de una gestión más profesional en los cementerios de Alcabre y Bouzas. Junto a un socio, desarrolló un programa de gestión que ahora implementa en ambos camposantos, con un enfoque en la discreción y el respeto durante los duelos.
La historia de estos cementerios en Vigo resalta la interacción entre la memoria, el paisaje y la gestión moderna, ofreciendo un descanso final que combina serenidad y belleza natural.