Totana inicia la recuperación de fosas sin herederos tras más de 75 años de abandono

Totana inicia la recuperación de fosas sin herederos tras más de 75 años de abandono

Durante más de siete décadas, algunas fosas del Cementerio Municipal “Nuestra Señora del Carmen”, en Totana, han permanecido intactas, sin visitas, sin flores y sin rastro de sus posibles herederos. Pero el paso del tiempo tiene consecuencias jurídicas, y ahora el Ayuntamiento ha dado un paso firme: recuperar esas propiedades funerarias que han quedado al margen de cualquier gestión familiar.

La decisión no es reciente. En abril de 2022, la Junta de Gobierno Local aprobó un expediente para declarar la caducidad de los títulos de derecho funerario sobre aquellas fosas en las que no se ha producido ningún enterramiento en los últimos 75 años y cuyos titulares o descendientes no han comparecido para renovar los derechos conforme a la ordenanza vigente.

El proceso ha sido minucioso. Desde el 21 de julio hasta el 1 de septiembre de 2024, el expediente fue expuesto al público. Se invitó a posibles herederos a presentar alegaciones para conservar la titularidad. Pero nadie respondió.

Las tumbas afectadas son concretas: las ubicadas en la Calle San Bartolomé, 14, Santo Domingo, 16, San Juan, 53 y Santa Teresa, 39. Al no haber comparecido ningún interesado, estas propiedades han pasado a formar parte del patrimonio municipal. Y no solo eso: también se contempla la exhumación de restos, en los casos necesarios, para rehabilitar las fosas y darles un nuevo uso.

Con base en el artículo 15.e de la Ordenanza Reguladora del Régimen Interior del Cementerio de Totana, el Ayuntamiento ejecuta así una acción legal pero también simbólica: cerrar el ciclo de aquellos espacios que ya no guardan vínculo vivo con ninguna familia.

Es una medida que, aunque técnica, también remueve emociones. Porque detrás de cada fosa olvidada hubo una historia. Y aunque hoy no quede quien la recuerde, el municipio se prepara para darles un nuevo destino.