Desde principios de 2025, el cementerio de Vila-real ha enfrentado una situación que ha afectado profundamente a sus residentes: la ausencia de columbarios disponibles para albergar las urnas de sus seres queridos incinerados. Esta carencia ha obligado a varias familias a llevar las urnas a sus hogares, generando preocupación y descontento en la comunidad.
Ante esta problemática, la vicealcaldesa y concejala de Cementerios, María Fajardo, ha manifestado que el Ayuntamiento está plenamente consciente de la situación y ha delineado un plan de acción con soluciones tanto inmediatas como a largo plazo.
En el corto plazo, se ha destinado una inversión de 30.000 euros para la construcción de 40 nuevos columbarios, con el objetivo de aliviar la demanda actual. Las obras están programadas para comenzar la próxima semana, según informó Fajardo.
Paralelamente, el consistorio está desarrollando un proyecto innovador denominado «espacio de descanso de almas». Este espacio permitirá a las familias depositar las cenizas de sus seres queridos en una zona especialmente diseñada con agua, ofreciendo una alternativa respetuosa y controlada para el descanso eterno.
Además, con miras a una solución sostenible en el tiempo, el Ayuntamiento ha planificado una inversión de 400.000 euros destinada a la ampliación del cementerio municipal. Esta expansión busca anticiparse a futuras necesidades y garantizar que todos los ciudadanos de Vila-real tengan un lugar digno para el reposo de sus familiares fallecidos.
La comunidad de Vila-real, caracterizada por su arraigo y tradiciones, ha recibido con esperanza estos anuncios, confiando en que pronto podrán rendir homenaje a sus seres queridos en espacios adecuados y respetuosos. Mientras tanto, las autoridades locales continúan trabajando para materializar estas iniciativas y responder a las necesidades de sus ciudadanos en momentos tan delicados.