La Funeraria municipal de Palma prevé adquirir por permuta el 40% del tanatorio de Bon Sosec
La Empresa Funeraria Municipal del Ayuntamiento de Palma de Mallorca (EFM) se hará con la propiedad del tanatorio de Bon Sosec, situado en el municipio de Marratxí.
Desde 2017, cuando se adelantó la ejecución del contrato de arrendamiento financiero suscrito por la empresa municipal en 1997, la empresa municipal es la propietaria del 60% de estas instalaciones, más el aparcamiento y de un solar de 40.000 metros cuadrados, en los que no se pueden construir sepulturas.
Según informa Diari de Mallorca, poco después de la formalización de esta operación, que supuso un coste de casi 1 millón de euros y un ahorro de gastos financieros en 10 años de 70.000 euros, los responsables de la funeraria municipal, con el gerente Jordi Vilà al frente, iniciaron las negociaciones con Funespaña, que en 2010 había adquirido por 3,6 millones a la antigua Bon Sosec S. A. el 40% restante del edificio del tanatorio y el cementerio.
Estos primeros contactos no dieron sus frutos, aunque en 2018 se retomaron con la premisa de que la operación no debía suponer un coste económico para ninguna de las partes, sino que se realizaría mediante la permuta de activos.
El acuerdo alcanzado con Funespaña se lleva hoy al consejo de administración de la Empresa Funeraria Municipal. En él se valora la finca propiedad de la funeraria de Palma en 916.504 euros, cantidad idéntica que los bienes de Funespaña que se permutan (el 40% del tanatorio). Por ello, las partes acuerdan que la permuta propuesta tiene carácter de «pura», dándose por pagadas con las adjudicaciones efectuadas sin que ninguna de ellas deba ser compensada. Asimismo, tanto la EFM como Funespaña renuncian a cualquier compensación que pueda derivarse de la permuta. Con esta operación la totalidad del tanatorio de Bon Sosec pasará a ser propiedad de la EFM, posibilitando, tal como explicó el gerente de la funeraria cuando se iniciaron las conversaciones hace ya cuatro años, una mejor gestión de estas instalaciones.
Por su parte, Funespaña, aunque dispone hasta ahora del 40% de la propiedad del tanatorio, tiene muy limitada su actividad en el recinto, puesto que la EFM dispone de la exclusividad de los servicios funerarios. Además, la distribución de los espacios en estas dependencias está «mezclada», lo que dificulta tanto su gestión como el mantenimiento, constituyendo también una fuente constante de conflictos.
