El Ayuntamiento de Colmenar Viejo ha dado inicio a las obras de ampliación del Cementerio de Santa Ana, una iniciativa que busca atender la creciente demanda de sepulturas en la localidad. La necesidad urgente de espacios para sepelios ha impulsado esta actuación, que cuenta con un presupuesto de 562.500 euros y un plazo de ejecución de tres meses.
La parcela en la que se están realizando los trabajos abarca 1,200 metros cuadrados, dentro de una superficie total del cementerio de 41,746 metros cuadrados. La intervención contempla la creación de una nueva plataforma de enterramiento con 84 fosas, que ofrecerán capacidad para 336 enterramientos. Además, se están desarrollando nuevos viales que cumplen con criterios de accesibilidad, así como muros de contención adaptados a las condiciones del terreno.
El proyecto también incluye mejoras en el mobiliario, con la instalación de bancos y papeleras que armonicen con las existentes, y la incorporación de arbolado y jardinería perimetral. Asimismo, se aprovechará la actuación para ampliar la red de alumbrado, mejorando así la infraestructura del cementerio.
El cementerio municipal, ubicado en la calle Diseminado, cuenta con un aparcamiento exterior descubierto y un edificio destinado a tanatorio y crematorio. A medida que se van ampliando las unidades de enterramiento, se facilita el acceso a estas mediante la creación de nuevos viales.
La ampliación del cementerio se enfoca especialmente en aumentar el número de fosas disponibles, dado que su disponibilidad ha disminuido más significativamente que la de nichos o columbarios. Este refuerzo asegura que el cementerio municipal mantenga siempre sepulturas libres, garantizando así el respeto y la planificación que estos espacios merecen.
Con este proyecto, el Ayuntamiento de Colmenar Viejo reafirma su compromiso con la mejora continua de sus infraestructuras municipales, asegurando un servicio adecuado y respetuoso para sus ciudadanos en momentos tan delicados como la despedida de un ser querido.