En Avilés, un debate acalorado ha surgido en torno a la gestión de los cementerios de la ciudad. Podemos ha levantado la voz para denunciar lo que consideran una «privatización encubierta» del servicio de cementerios, al ser propuesto su traspaso a la Empresa de Servicios Auxiliares, una entidad municipal que ya gestiona otros servicios como el de conserjes y la limpieza de centros deportivos y culturales.
Hasta ahora, los cementerios han sido atendidos por personal funcionario del Ayuntamiento de Avilés, lo que, según Podemos, garantizaba un control directo y una gestión pública que respondía a los intereses de la ciudadanía. Sin embargo, la propuesta de incluir este servicio en la empresa municipal ha generado preocupación entre los miembros de la formación morada. Argumentan que este cambio no solo debilita el modelo de gestión pública, sino que también afecta la estabilidad laboral y el trato justo a los empleados municipales.
El edil de Podemos en Avilés ha expresado su descontento, subrayando que esta medida no responde a las demandas ni de los trabajadores ni de los sindicatos. Insinúa que podría haber otros intereses detrás de esta decisión, ajenos a las necesidades reales de la comunidad y quizás vinculados a las motivaciones del PSOE.
La propuesta, que será llevada a pleno próximamente, fue inicialmente una de las principales demandas de Cambia Avilés en el acuerdo de gobierno. No obstante, la falta de consenso podría impedir que se apruebe, ya que Podemos ha adelantado su voto negativo.
Este tema ha generado un intenso debate en la ciudad, poniendo de manifiesto las tensiones políticas en torno a la gestión de los servicios públicos. Mientras algunos ven en la propuesta una oportunidad para modernizar y eficientizar el servicio, otros temen que se pierda el control directo y la transparencia en la gestión de un servicio tan delicado como el de los cementerios.
La discusión en Avilés es un reflejo de un debate más amplio sobre la gestión de los servicios públicos en España. La preocupación de los ciudadanos por mantener un sistema que priorice el bienestar público es palpable, y las decisiones que se tomen en torno a este asunto serán observadas de cerca por todos los sectores involucrados.




