En el cementerio municipal de San Román, en Arrecife, se están llevando a cabo importantes trabajos de rehabilitación en 40 nichos que, con el paso del tiempo, han sufrido un notable deterioro. Esta iniciativa, impulsada por la Concejalía de Sanidad, busca preservar el respeto y la dignidad en un lugar tan significativo para las familias. Cathaysa Suárez, concejala de Sanidad, ha destacado la necesidad de estas mejoras para mantener el cementerio en óptimas condiciones de seguridad y respeto.
La rehabilitación es una tarea delicada que, aunque necesaria, puede causar incomodidades a los visitantes. Suárez, consciente de esta situación, ha emitido una carta pública en la que pide disculpas a las familias por las posibles molestias ocasionadas, como la presencia de restos de cemento o manchas derivadas de la obra. «Entendemos que pueda resultar incómodo para los familiares, pero pedimos comprensión, ya que se trata de actuaciones imprescindibles para conservar el cementerio en las mejores condiciones posibles», explica Suárez.
Este compromiso con la mejora de infraestructuras es fundamental para la comunidad, garantizando que los espacios de descanso final sean lugares de paz y dignidad. La importancia de estos trabajos radica no solo en la conservación material, sino también en el respeto hacia las historias y memorias que estos nichos albergan. Cada nicho es un testimonio de vida que merece ser preservado con el mayor cuidado.
El esfuerzo por mantener y mejorar el cementerio de Arrecife refleja un compromiso más amplio con la comunidad, asegurando que todos los ciudadanos tengan acceso a un lugar de descanso final que sea seguro, respetuoso y digno. Las obras, aunque puedan causar inconvenientes temporales, son una inversión en el futuro del cementerio y en el respeto que se debe a aquellos que han sido sepultados allí.
Con estas acciones, la Concejalía de Sanidad de Arrecife reafirma su compromiso con la comunidad, demostrando que, incluso en los pequeños detalles, se puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida y en el respeto a la memoria de los que ya no están. La intervención en San Román es un recordatorio del valor de cuidar nuestros espacios de memoria y de la importancia de la empatía y el respeto en todas las acciones comunitarias.
