El Ayuntamiento de Badajoz ha dado un paso significativo hacia la ampliación del cementerio de Nuestra Señora de la Soledad, conocido como el cementerio nuevo. En respuesta a la creciente demanda de espacios de sepultura, el consistorio ha licitado la construcción de dos nuevos módulos que añadirán 364 nichos y 288 columbarios a la infraestructura existente. Esta expansión se llevará a cabo con una inversión de 585.796,09 euros.
Según datos del Instituto de Estadística de Extremadura, la ciudad de Badajoz ha experimentado un promedio de más de 1.220 defunciones anuales en los últimos cinco años, siendo 2023 el año más reciente con 1.179 muertes registradas. Esta realidad subraya la necesidad urgente de ampliar el cementerio nuevo, que alberga la mayoría de los enterramientos en la ciudad. El pliego de prescripciones técnicas del proyecto justifica la inversión, señalando la ocupación creciente de los nichos actuales y la necesidad de nuevos espacios en un plazo breve.
Los nuevos bloques, numerados como 64 y 65, se construirán utilizando bloques prefabricados de hormigón, lo que garantiza calidad y durabilidad. Este método ha sido empleado en años anteriores y ha demostrado ser efectivo en términos de mantenimiento, que es prácticamente nulo. Además, los acabados mejoran significativamente en comparación con las construcciones funerarias tradicionales.
La ubicación de estos bloques será al final de la avenida principal del cementerio, detrás de la capilla, formando una nueva manzana de enterramientos. El proyecto también incluye la pavimentación de las áreas que separan cada módulo y la urbanización de las calles perimetrales. Se plantarán cipreses, limoneros y rosales en las zonas verdes, añadiendo un toque de serenidad y belleza al entorno.
Además, el ajardinamiento de los parterres se complementará con la instalación de cuatro bancos de fundición, papeleras y fuentes sobre pequeños monolitos de granito. Estas mejoras no solo aumentarán la capacidad del cementerio, sino que también mejorarán la experiencia de los visitantes, ofreciendo un lugar de descanso final que sea respetuoso y digno.
En conclusión, la ampliación del cementerio nuevo de Badajoz es una respuesta necesaria a las necesidades crecientes de la ciudad, asegurando que haya espacio suficiente para honrar a los difuntos de manera adecuada y respetuosa.