Un terreno de casi 4.000 metros cuadrados cambiará pronto su aspecto en Torrelodones. Allí, en el paraje conocido como Prado de la Solana, comenzarán las obras para habilitar un aparcamiento en superficie con capacidad para 92 vehículos. La zona, situada junto al cementerio y el tanatorio municipal, se transformará en un espacio más funcional y accesible, pensado para dar respuesta a una necesidad recurrente de vecinos y visitantes.
El proyecto no se limita a trazar plazas de estacionamiento. La intervención incluye un plan de ajardinamiento del perímetro, con nuevo arbolado y mejoras en el pavimento que conduce al tanatorio. El objetivo es integrar el aparcamiento en el entorno y al mismo tiempo facilitar el tránsito hacia unas instalaciones que suelen recibir una alta afluencia en momentos delicados para las familias.
El acceso principal estará en la avenida de Los Peñascales. Será único y directo, lo que permitirá un uso independiente al horario de las instalaciones municipales y deportivas a las que también dará servicio. De este modo, se busca descongestionar una zona en la que la falta de aparcamiento ha sido motivo de quejas durante años.
El contrato fue adjudicado en agosto por la Junta de Gobierno Local a la empresa Serco Guma, S.L., que será la encargada de ejecutar las obras. El presupuesto asciende a 360.718 euros más IVA y el plazo de construcción previsto es de cuatro meses.
La iniciativa responde a un compromiso del equipo de gobierno presidido por Almudena Negro: ofrecer soluciones prácticas a los problemas cotidianos de movilidad y accesibilidad en el municipio. Con este nuevo aparcamiento, se persigue no solo aliviar la escasez de plazas en el entorno del tanatorio y el cementerio, sino también generar un espacio más ordenado y respetuoso con el paisaje urbano.
Cuando finalicen los trabajos, Torrelodones contará con un aparcamiento renovado, verde y accesible, diseñado para hacer más llevaderos los desplazamientos en un punto especialmente sensible de la localidad.