Una escena de tensión se vivió en el Servicio Médico Forense (SEMEFO) de Puebla la tarde de este jueves, cuando trabajadores de dos funerarias se enfrentaron por el traslado de un cuerpo. El incidente dejó una persona lesionada, aunque afortunadamente no de gravedad. Todo comenzó cuando una de las funerarias, contratada directamente por la familia del fallecido, llegó al lugar para recoger el cuerpo. Sin embargo, al llegar, se encontraron con que la funeraria Abundiz ya se encontraba en el SEMEFO, en una zona restringida, lo que desató el conflicto.
La disputa inicial se centró en las palabras, ya que ambas empresas afirmaban tener la autorización de la familia para llevarse el fallecido. Sin embargo, los ánimos se caldearon rápidamente, y la discusión derivó en un altercado físico que no pasó desapercibido para los transeúntes de la zona. Este no es un incidente aislado, pues en ocasiones anteriores, otras empresas del sector han expresado su descontento con la funeraria Abundiz, acusándolos de acceder al SEMEFO sin respetar las restricciones, posiblemente debido a un trato preferencial.
El pasado 1 de julio, una escena similar ocurrió cuando dos trabajadoras de diferentes funerarias protagonizaron una riña frente a las instalaciones del SEMEFO en el Infonavit Agua Santa. En esa ocasión, las involucradas pertenecían a las funerarias Abundiz y Téllez, y el enfrentamiento también requirió la intervención de las autoridades. Elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) tuvieron que trasladarse al lugar para controlar la situación y detener a las mujeres implicadas.
Estos incidentes han puesto de manifiesto la competencia feroz y, en ocasiones, desleal que existe entre las funerarias en Puebla, especialmente cuando se trata de acceder a cuerpos en el SEMEFO. Las acusaciones de favoritismo y la falta de regulación clara en el acceso a los cadáveres han sido temas recurrentes en el sector. Las autoridades locales enfrentan el desafío de implementar medidas que garanticen un trato justo y equitativo para todas las empresas funerarias, así como para las familias que confían en sus servicios durante momentos difíciles.
Mientras tanto, la comunidad observa con preocupación estos altercados, que desvirtúan el propósito fundamental de las funerarias: ofrecer un servicio respetuoso y digno para los seres queridos que han partido.