Una mañana distinta en el cementerio de Antigua. Lo que debía ser un espacio de paz y recogimiento se convirtió en un escenario de desolación. Lápidas rotas, nichos dañados y figuras religiosas hechas pedazos es lo que encontraron los vecinos y visitantes al llegar al recinto. La indignación no tardó en extenderse por el municipio, dejando una pregunta en el aire: ¿quién pudo cometer un acto de vandalismo tan cruel?
Las primeras investigaciones apuntan a que los responsables ingresaron al cementerio durante la noche, aprovechando la falta de vigilancia. Testigos aseguran que se escucharon ruidos extraños en la zona, pero nadie imaginó la magnitud de lo que ocurría hasta la mañana siguiente. Imágenes captadas en el lugar muestran cruces derribadas, esculturas religiosas quebradas y numerosos destrozos en varias tumbas.
El impacto emocional ha sido profundo. Para muchas familias, visitar a sus seres queridos en el cementerio es una tradición sagrada, un momento de conexión y recuerdo. “Es muy doloroso ver esto. No solo destruyeron monumentos, sino que también faltaron al respeto a la memoria de quienes descansan aquí”, expresó un vecino afectado.
Ante la indignación ciudadana, el Ayuntamiento de Antigua ha condenado enérgicamente lo sucedido y ha anunciado un refuerzo en la seguridad del camposanto. “No podemos permitir que hechos como este queden impunes. Se tomarán medidas para evitar que vuelva a ocurrir”, afirmó un portavoz municipal.
La policía ya ha iniciado una investigación para dar con los responsables de este acto vandálico. Mientras tanto, los vecinos exigen respuestas y, sobre todo, acciones concretas para garantizar la protección de un espacio que pertenece a toda la comunidad.
Este incidente ha avivado la preocupación por el aumento de la criminalidad en la zona. Cada vez son más los ciudadanos que piden medidas contundentes para reforzar la seguridad en los espacios públicos. Mientras tanto, el cementerio de Antigua intenta recuperar su tranquilidad, con la esperanza de que la justicia prevalezca y se restablezca el respeto por la memoria de los difuntos.