La expansión del cementerio municipal de Guadalajara está a punto de hacerse realidad. El pasado viernes 10 se cerró el plazo de presentación de ofertas para la licitación de las obras, financiadas íntegramente con fondos municipales. Según el Ayuntamiento, en tan solo tres meses, el proyecto estará concluido, marcando un hito importante para la ciudad.
La actuación incluye la construcción de 22 nuevas sepulturas en el patio 8, que se unirán a las ya existentes, mientras que los 36 nuevos nichos se ubicarán en el patio 7. Esta ampliación no solo responde a una necesidad urgente, sino que también incluye un proyecto paisajístico para mejorar la estética y funcionalidad del recinto.
Además de las nuevas sepulturas y nichos, se construirá un bulevar de casi 400 metros cuadrados. Este espacio contará con parterres que acogerán al menos 16 cipreses, simbolizando la vida y la paz, y un muro de contención que garantizará la estabilidad de la zona.
Según el concejal García, este proyecto es parte de un esfuerzo continuado por mejorar las instalaciones del cementerio desde el inicio de su gestión. “Cuando llegamos al gobierno municipal, solo había ocho nuevas sepulturas disponibles y tuvimos que actuar con diligencia”, ha destacado. En apenas un año y medio, se han construido 66 nuevas sepulturas, a las que ahora se suman las 22 recién licitadas.
Actualmente, el cementerio de Guadalajara cuenta con una capacidad diversa: 3.768 sepulturas temporales, 71 panteones, 5.216 sepulturas perpetuas, 540 nichos y 601 columbarios. Sin embargo, el espacio sigue siendo suficiente, especialmente tras la incorporación de los patios 5, 6, 7 y 8, que permiten prever nuevas construcciones durante al menos diez o quince años más.
El plan no solo asegura la disponibilidad de espacio en el cementerio, sino que también mejora la calidad de las instalaciones para los ciudadanos. La integración del bulevar y el arbolado busca humanizar y embellecer este lugar de memoria y descanso. Con esta obra, Guadalajara no solo se adapta a las necesidades actuales, sino que también sienta las bases para un futuro de respeto y dignidad.