Catarroja, un cementerio que crece con sensibilidad y respeto
El cementerio de Catarroja, un espacio de memoria y recogimiento, está en plena transformación para adaptarse a las necesidades de sus vecinos. En las próximas semanas, el municipio culminará la construcción de 48 nuevos nichos, parte de una estrategia a largo plazo para modernizar y ampliar el recinto. Estos nuevos nichos estarán ubicados en una calle recientemente urbanizada al norte del cementerio, preparando el terreno para futuros desarrollos, como la apertura de un acceso adicional en los próximos años.
La obra, adjudicada por 66.000 euros más IVA, no solo responde a la demanda actual, sino que también se enmarca en un proyecto más amplio que busca mejorar las instalaciones y convertirlas en un lugar más accesible y acogedor para las familias de Catarroja. Según Xavi Bellot, concejal del cementerio, el objetivo principal es crear un espacio que combine funcionalidad y respeto por su significado emocional. “Hemos trabajado para que este espacio, tan importante para centenares de familias, sea lo más confortable posible y reúna todas las condiciones necesarias. Aunque esta ampliación es un gran paso, seguiremos mejorando las instalaciones según las necesidades del vecindario”, aseguró Bellot.
Esta ampliación se suma a una serie de mejoras realizadas en los últimos meses. Entre las iniciativas destacadas están la renovación de la fachada principal, que ha recuperado su aspecto histórico, y la ampliación de la zona de descanso en el área de los columbarios. También se han mejorado las instalaciones exteriores, incluyendo la cara que da a la carretera de acceso al municipio, y se han implementado zonas específicas para reciclaje.
Con esta serie de intervenciones, el Ayuntamiento de Catarroja demuestra su compromiso por modernizar un lugar que, además de su importancia funcional, guarda un profundo significado emocional para los habitantes. La nueva calle y los 48 nichos son un reflejo de la intención de mirar al futuro sin perder de vista el respeto por el pasado.
Estas acciones no solo responden a la necesidad de espacios, sino que reflejan la sensibilidad y el cuidado con los que el municipio gestiona un lugar que, para muchos, es un símbolo de memoria y unión familiar.