El acceso a la ampliación del cementerio de A Estrada sigue parado y criando maleza

El Ayuntamiento de A Estrada (provincia de Pontevedra) aprobó la licencia urbanística de primera ocupación para la ampliación del cementerio de Figueiroa. Este último trámite administrativo hizo posible poner en uso los nuevos panteones, a los que de hecho ya se han realizado traslados de cenizas familiares.

Sin embargo, el conflicto por la ampliación del cementerio continúa abierto y las obras de urbanización del nuevo acceso al camposanto no avanzan. En lo que se refiere al conflicto, la Audiencia de Pontevedra ha fijado la vista para el mes de noviembre. El juicio aunará dos causas, una contra la ampliación del camposanto en sí misma y otra contra la legalización del cementerio original. Los detractores de la ampliación consideran que la concesión de la licencia de ocupación no ha hecho más que culminar una tramitación llena de irregularidades graves que es preciso subsanar.

Por otra parte, para la finalización de las obras de urbanización del camposanto no hay fecha prevista. Pese a la entrada en funcionamiento de los nuevos panteones, el asfaltado del vial de acceso a la zona sigue sin ejecutarse, igual que el párking que iba a dar servicio a esta área y el ajardinamiento de toda la zona.

Maleza en expansión
En la actualidad, transcurrido más de una año desde la finalización de los panteones en sí, todo lo que hay del nuevo acceso es una valla cortando el paso y maleza creciente que se extiende por un lado hacia el vial inconcluso y que por el otro, al otro lado de la verja, invade la acera del Camino del cementerio. Las zarzas dejan inutilizado un banco público y obligan a los transeúntes a bajar de la acera.