Han robado las cruces de las tumbas de un cementerio de Castroviejo del Madrigal (provincia de León), no se sabe a ciencia cierta cuando se produjo el robo porque se trata del viejo cementerio donde no se entierra desde 1990 y los pocos visitantes que recibe se concentran durante el día de Todos los Santos.
Pero la realidad es que tras la debilidad de esta puerta ya no están las imágenes que pendían de las cruces. Crucifijos de latón, bronce o cobre, cuyo número está por determinar.
Para los vecinos el daño es más moral que económico porque allí descansan sus seres queridos aunque no dudan de que los amigos de lo ajeno habrán encontrado algún beneficio en el saqueo. El peso o el valor del metal parece haber disuadido a los cacos de hacerse con este otro botín , estas grandes cruces de forja, que aún permanecen en el campo santo.
El Ayuntamiento ha cursado la pertinente denuncia ante la Guardia Civil porque no se trata de un hecho aislado sino que el pueblo ha sufrido varios robos en los últimos tiempos.